¿Vida después de la Muerte?

EXISTE un evento del cual nos hablan las Sagradas Escrituras el cual puede considerarse como glorioso e imponente, este evento es la resurrección de los muertos.

¿Vida después de la muerte? Ésta pregunta ha surcado la mente de los hombres por siglos, se han inventado teorías, creencias, etc., que hablan al respecto.

Precisamente, hace unos días leía un libro de Jorge Luis Borges, escritor argentino, donde abarcaba lo que sucedería con el hombre si éste fuera inmortal; la resolución que da Borges en su libro es que el hombre se convertiría en un ente inútil, inmóvil, totalmente en estado vegetal.

Las religiones provenientes del Oriente, que en los últimos años han logrado miles de seguidores; creen en la reencarnación. Esto es vivir y vivir miles de veces, ascendiendo en cada vida de acuerdo con las obras que hayamos hecho en la vida previa.

La religión Católica, influenciada por el pensamiento griego y romano, enseña que el hombre al morir puede ir al cielo, al purgatorio o al infierno. O sea que en realidad su vida no termina, sino que continua y aparte de ello, si va al cielo adquiere carácter celestial; si es al purgatorio, mediante misas y otras letanías su familia puede lograr que llegue al cielo.

Esto es lo que piensan algunos hombres respecto a la muerte, pero nosotros sabemos que tenemos que morir, ya que este es nuestro destino: “Y de la manera que está establecido a los hombres que mueran una vez, y después el juicio” (Hebreos 9:27).

Pero ahí no termina todo (con la muerte) como muchos creen. Leamos lo que nos dice el Apóstol Pablo: “Porque por cuanto la muerte entró por un hombre (Adán), también por un hombre (Jesús) la resurrección de los muertos”. (1ª Corintios 15:21).

Esta es la promesa que tenemos si cumplimos con la voluntad de Dios: Vida después de la muerte.

Así será, en un abrir de ojos, al tocar la última trompeta, los muertos en Cristo serán levantados de su sepulcro sin importar los años que tengan ahí; en ese instante se cumplirá lo escrito en 1ª Corintios 15:55; “¿Dónde está, oh muerte, tu aguijón? ¿Dónde, oh sepulcro, tu victoria?”.

¡Qué hermoso será ese momento cuando Jesús regrese a la tierra!

Hermanos, la promesa de la resurrección dada por Jesús está en pie... ¿no le gustaría ver a sus padres, a sus hermanos, a su cónyuge, en ese día?

Si usted hace lo ordenando por Dios esté seguro que los verá, y no sólo a ellos sino a Noé, Abraham, Isaac, David, Pablo, Timoteo, a todos los que han muerto en el nombre del Señor y a Jesús el artífice de nuestra salvación.

¡Abracemos con más ahínco el Evangelio de Jesús, perseveremos en él para ser partícipes de ese momento!

Obrero Israel Hernández Martínez